En ocasiones encontramos personas que tienen perspectivas muy distintas y peculiares de las cosas ‘comunes'; Hayika es una de ellas. Vive desde hace 4 años en México y es originaria de París, hija de una familia muy cercana al arte: una madre actriz y resalta el dato de que Nacho López fue su tío abuelo. Heredera entonces de curiosidad innata por la fotografía, Hayika toma imágenes desde hace un par de años. Fue en su tumblr donde encontré hace unos meses sus fotografías y llamó mi atención la espontaneidad en todas, además del formato análogo que cuenta su modo de vida: el trabajo, los amigos y romances que cruzan frente a su lente. Aquí un resumen sobre la breve plática que tuve hoy con ella.
“…Hubo un día en que me dieron mi primera cámara, de esas gordas, feas y plateadas…empecé por tomarme fotos a mí, quizá por inseguridad y comencé a subirlas a las redes de ese entonces como myspace…”
Es curioso que Hayika se defina a sí misma como una joven tímida, pues su trabajo es sumamente íntimo y podemos verlo publicado en redes sociales, donde muestra su cotidianidad; confiesa el gusto por compartir con el público y amigos las experiencias personales. Es inevitable poner especial atención en las tomas “eróticas” de su selección: jóvenes que entran, permanecen o salen de su vida, capturados a la mañana siguiente de un encuentro, durante un juego o sencillamente tranquilos y desnudos. La espontaneidad de los momentos y la despreocupada simetría de las imágenes son el principal atractivo.
El tema del amor es clave en la plática, fue por su ex que vino a México y los chicos que se enamoran de ella o no, son los motivos de sus retratos. Complementa su trabajo con otras fotos de amigos, lugares y circunstancias que le interesa preservar. Imagen a imagen su trabajo en una tienda de ropa, su habitación y otros sitios se transforman en experiencias que hablan por sí mismas.
Aunque han invitado a Hayika a realizar shootings planeados, ella opta siempre por cambiar la situación a un momento más casual para propiciar la interacción y naturalidad del modelo. Concordamos con ella en que este plano es su especialidad y que así propicia a que sus imágenes sean inconfundibles. Podríamos asociar su acercamiento instintivo al documental a las primeras fotos de McGinley o Goldin. Es importante señalar que las fotos siempre cumplen, primero, con un motivo personal sin pretensión de ser tomadas como un trabajo estrictamente artístico.
Las fotos de Hayika tuvieron hace una semana su primera exposición en Muebles Sullivan y han sido publicadas en Vice, Perro Zombie y otros sitios web. Pronto en Pánico dedicaremos un viernes al mes a publicar colaboraciones con esta talentosa fotógrafa.
Por: Leo Sam
